Rolando Schrupp
El 14 de Febrero de 1.825 Santa Cruz declaraba su independencia luego de casi 15 años de Guerra de guerrillas en la llanura donde todos los pueblos se hicieron uno peleando en contra de las nuevas diferencias. Hubo rebeliones, tumultos, alzamientos y motines, hubo juntas, cabildos y proclamas, hubo guerrillas cuartelazos y emboscadas; la tierra se estremeció con el galope de los caballos chicoteados por consignas, Cañoto con su guitarra cantando salió a pelear, Mercado mostró las garras, hicimos mil retretas y Warnes fundó su Republiqueta, como reza el Soneto.
En esos tiempos se escuchaba cantar: uno más uno son dos, unos con otros son mil y mil alzan su voz en grito de Montoneros. Esta es nuestra verdadera historia que a pesar que la historia oficial intenta silenciar e invisibilizar no se puede callar. No es casual que la geopolítica andina intenta sistemáticamente robarle y matarle el alma a nuestro pueblo, tratando incansablemente que perdamos la memoria y olvidemos que el ejército del pueblo salió triunfante y los Cambas nos hicimos dueños de la naturaleza.
Por ello una intelectualidad orgánica escogió el 14 de Febrero de 2.001 para lanzar el Memorando No. 1 de Nación Camba resembrando la semilla de la rebeldía Camba rescatando la idea de autodeterminación. Hubo rebeliones, juntas, cabildos y referéndums, y los pueblos se unieron en uno en lucha contra las diferencias. Más de una década después la idea está más viva que nunca, pues las personas podremos pasar, pero son las ideas las que prevalecen en el tiempo.
Se puede afirmar que la lucha entre una Nación sin Estado y un Estado sin Nación continuará pues los Hijos del Memorando somos todo un pueblo que asume la Causa Camba como consigna suprema.